Adrián Pérez participó como denunciante en la causa y afirmó que los sobreprecios que niegan los peritos estaban probados. La acusación contra De Vido.
20.07.2011 | 05:14
El diputado nacional de la Coalición Cívica Adrián Pérez, denunciante en la causa Skanska, advirtió que "los sobreprecios y los retornos a los funcionarios públicos están acreditados en el expediente judicial".Pérez dijo que ello está comprobado "a través de las comunicaciones internas entre TGN (Transportadora de Gas del Norte) y Enargas (Ente Nacional Regulador del Gas) y las escuchas a los involucrados".
Y acusó al ministro de Planificación, Julio De Vido, de querer "diluir la responsabilidad de los funcionarios de su cartera con el argumento de la corrupción entre privados".
"Tal como surge de las constancias que constan en el expediente, en varias oportunidades TGN advirtió al ENARGAS, organismo controlador de las obras, acerca de la existencia de sobreprecios en las ofertas realizadas por las diferentes empresas (entre ellas Skanska SA) que participaron del concurso de precios para la ampliación del Gasoducto del Norte, sin perjuicio de lo cual, finalmente resultaron adjudicatarias de las obras por orden de Enargas", dijo el legislador.
Pérez reseñó que "el 31 de enero de 2005 TGN advierte al Enargas que, acerca de las ofertas que ganaron en el concurso privado que realizó para la construcción y montaje de tres plantas compresoras, cabe poner de manifiesto que el desvío respecto a lo oportunamente presupuestado para dichas tareas alcanza un 152% en las plantas tipo A y un 82% en las plantas tipo B".
"A pesar de esta advertencia Enargas ordenó igual la adjudicación de las obras a la empresa Skanska con una diferencia de más del 100% entre el presupuesto oficial y el precio de adjudicación", advirtió.
Y añadió que "la participación del Estado quedó corroborada a través de las escuchas telefónicas entre dos ejecutivos de la empresa, Claudio Corizzo -auditor interno de Skanska- y Javier Azcárate -ex gerente comercial de la multinacional sueca- en las que se habla del pago de coimas en la ampliación de un gasoducto".
"El diálogo entre ambos se produjo en marzo de 2006 en la sede de la empresa, Diagonal Sur al 500. Fue en el marco de un sumario que Skanska armó con el supuesto fin de esclarecer el caso, tras ser allanada por la utilización de facturas apócrifas", amplió.
"La desgrabación completa de estas escuchas fue una prueba importante para llamar a indagatoria a dos funcionarios sospechados de cobrar coimas en la ampliación de gasoductos. Fulvio Madaro, presidente del Enargas, y Néstor Ulloa, gerente de Nación Fideicomisos fueron indagados y procesados", señaló. Pérez aseveró que "De Vido busca deslindar responsabilidades en el sector privado cuando existen en la causa elementos suficientes para sospechar de funcionarios de su cartera".
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