De acuerdo a los datos contenidos en el estudio titulado ¿Guanacos Vencidos?, del Equipo Diocesal de la Pastoral Aborigen, la empresa canadiense Pan American Silver, "se propone explotar los yacimientos de minerales diseminados mediante la minería de gran escala a cielo abierto".
En estos yacimientos -dice el trabajo- hay todo tipo de minerales, pero "a la empresa le interesan sólo algunos: plata, cobre y plomo".
"Varias explosiones diarias abrirán las montañas. Enormes palas y camiones transportarán las rocas, que serán reducidas a polvo (lo que demanda cantidades enormes de energía)", describe además el estudio.
La escala de la operación minera, destaca, "no tiene precedentes en la Patagonia", ya que "la empresa espera obtener un total de casi 20 mil toneladas de plata (632 millones de onzas) en 20 años de actividad, mediante dos líneas de concentrados (lodos sin valor agregado): plata-cobre y plata-plomo".
El territorio donde se ubica el proyecto minero no es un desierto vacío. Por el contrario, "es un ecosistema lleno de vida, con paisajes, tradiciones y memorias". En ese paisaje más de una vez subestimado "el Proyecto Navidad consumirá enormes cantidades de agua que obtendrá de "acuíferos subterráneos y del desagote propio de la mina", de acuerdo a la empresa.
Los mallines, recuerda el equipo de la Pastoral Social, "son el alma de la meseta y los ecosistemas más productivos".
"El agua subterránea emerge naturalmente formando una extensa red de aguadas, mallines y lagunas. Estas fuentes, que sustentan a los pobladores del campo, se verán amenazadas por el consumo desmedido del emprendimiento minero", alerta después.
"Millones de toneladas de colas serán abandonadas cuando termine la explotación del proyecto Navidad y quedarán allí para siempre. Por su alto contenido de metales pesados como el cadmio (que la empresa no considera rentable recuperar) y su capacidad para generar drenajes ácidos serán una amenaza para la vida en la meseta", dice luego el trabajo de la Pastoral Aborigen.
"El proyecto Navidad generará más residuos que las ciudades de Puerto Madryn, Trelew, Rawson, Esquel y Comodoro Rivadavia juntas y removerá un total de 418 millones de toneladas de material no mineral en los 20 años de producción previstos", subraya luego.
"Cuando la mina esté en pleno funcionamiento el paisaje se alterará definitivamente. El polvo de las voladuras será transportado muchos kilómetros por los fuertes y constantes vientos. Irán volando también los metales pesados y los químicos que utilizan para las detonaciones", vuelve a alertar la Pastoral.
Esperemos que tantas advertencias sirvan para evitar el saqueo, la contaminación, la miseria y las nubes de ceniza que podrían cubrirnos, por décadas, el horizonte. http://www.rawsonline.net/
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